Mayo es el mes del cáncer de vejiga, una enfermedad en la que suele tener incidencia el consumo de tabaco. Con la consigna #NoSePongaRojo. En esta nota se tratará Cuál es la asociación entre el tabaco y el cáncer de vejiga y de su síntoma más común: la sangre en la orina.

Relación entre el cáncer de vejiga y el tabaquismo
The cáncer de vejiga es uno de los tipos de cáncer más directamente asociados al consumo de tabaco. Aunque el cáncer de pulmón es el más conocido, fumar también incrementa significativamente el riesgo de desarrollar cáncer de vejiga. Esta enfermedad representa el séptimo tipo de cáncer más diagnosticado en hombres a nivel mundial y el décimo considerando ambos géneros.
Sustancias tóxicas del tabaco y su impacto en la vejiga
El humo del cigarrillo contiene más de 7.000 sustancias químicas, de las cuales aproximadamente 70 son cancerígenas. Entre ellas se encuentran el alquitrán, la nicotina, el arsénico, el formaldehído, el cadmio y el polonio-210. Estas sustancias ingresan al cuerpo con cada inhalación, se absorben en la sangre y son filtradas por los riñones, concentrándose en la orina. Como esta orina permanece en la vejiga antes de ser expulsada, el órgano queda expuesto durante horas a estos químicos nocivos, lo que puede provocar mutaciones celulares que deriven en cáncer.
Síntomas del cáncer de vejiga: señales de alerta
Uno de los principales síntomas del cáncer de vejiga es la presencia de sangre en la orina (hematuria), que puede manifestarse con tonalidades naranja, rosa o rojo oscuro. Esta señal suele aparecer de forma intermitente y sin dolor, lo que lleva a que muchas personas no consulten de inmediato. Otros síntomas incluyen:
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Dolor o ardor al orinar
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Necesidad de orinar con frecuencia y en pequeñas cantidades
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Sensación de urgencia constante para orinar
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Dolor en la parte inferior del abdomen
Diagnóstico tardío: un riesgo innecesario
Muchas veces, el cáncer de vejiga se detecta en etapas avanzadas debido a la falta de síntomas o a la subestimación de los mismos. Si bien la hematuria puede deberse a causas como infecciones urinarias, cálculos renales o enfermedades prostáticas, es fundamental realizar una consulta médica inmediata ante cualquier episodio.
Prevención del cáncer de vejiga: dejar de fumar es clave
La prevención del cáncer de vejiga pasa, principalmente, por evitar el consumo de tabaco. Dejar de fumar reduce de forma significativa el riesgo de desarrollar esta enfermedad, así como otros tipos de cáncer relacionados al sistema urinario y respiratorio.
Por ejemplo:
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A los 5-10 años de haber dejado de fumar, se reduce en un 50% el riesgo de cáncer de boca, garganta y laringe.
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Dentro de los 10 años, disminuye la posibilidad de desarrollar cáncer de esófago, riñón o vejiga.
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A los 15-20 años, el riesgo de padecer varios tipos de cáncer se equipara al de una persona que nunca fumó.
Conclusion
El tabaquismo es una causa directa del cáncer de vejiga. El diagnóstico temprano mejora notablemente las posibilidades de tratamiento exitoso, por eso es esencial estar atentos a cualquier señal del cuerpo. Consultá con un especialista si notás sangre en la orina o molestias al orinar, especialmente si sos o fuiste fumador.
The Dra. Paula Grinstein, médica uróloga, del Centro Argentino de Urología.